Tiramisú

Estoy tan contenta con el nuevo cacharrito que tengo en casa que hoy vengo a enseñarte dos cosas.

Te voy a enseñar a preparar tu propio tiramisú. Sí, sí, además de una receta tipo te voy a enseñar las pautas para que hagas el tuyo propio y te olvides de buscar recetas en internet mientras te vuelves tarumba especulando cuál estará más o menos rica, cuál será más fiel a la receta original… y todas esas tonterías.

Y por otra parte te voy a enseñar a mi nueva amiga. NESCAFÉ® Dolce Gusto®  ha tenido la amabilidad de invitarme a probar su cafetera Eclipse, y estoy encantada. Es una cafetera de cápsulas, de esas que existen hoy en día con las que, hasta al más negado para hacer café (servidora), hace unos cafés estupendos. Desde que las uso parece que he hecho un máster en ellos.

Ya conocía los cafés de Dolce Gusto porque es la cafetera que tenemos en la oficina, en concreto Melody de la Krups. Así que ya sabía que los cafés me iban a gustar, a mí y a los míos, cosa importante. Pero es que el diseño de la Eclipse me ha encantado. Si bien de primeras puede parecer un poquito aparatosa por el tamaño o el diseño, no lo es para nada. A mí me resulta más cómoda porque tiene menos fondo y me ocupa menos encima de la mesa, más que una cafetera ¡parece un adorno!

Pero es que encima la forma de hacer cafés y el mecanismo de apertura y cierre es una chulada. Simplemente con un toque de dedo, rollo táctil, como los teléfonos tan modernos que gastamos ahora, se abre. Y con otro toque, preparas el café. Me parece especialmente cómodo también que cada cápsula indique la cantidad de agua que has de echar para hacer el café perfecto. Lo seleccionas y listo. Pero si te gusta más largo o más corto también puedes hacerlo a tu medida.

¿Y tienen bastantes tipos de cafés y tés?

Un montón.

Han incluido múltiples variedades. En casa los que más éxito han tenido hasta el momento son el café barista, el Espresso Intenso Descafeinado  (para la recetilla que te traigo hoy) y el Chai Tea Latte, que tiene un sabor a arroz con leche de alucinar.

Pero si como yo, no tomas leche, o tratas de evitarla en la medida de lo posible, te diré que además tienen ¡UN CAPUCCINO CON LECHE DE SOJA! Brutal.

Y  tras este paréntesis, déjame contarte cosillas de la receta de hoy.

Creo que el tiramisú es el más ladrador y menos mordedor en lo que a postres se refiere. Da un respeto terrible hacerlo por miedo a meter la pataza pero al final resulta ser uno de los postres más fáciles que existen.

Seguro que has buscado la receta original un centenar de veces. La auténtica, la italiana, la que te teletransporte a la Venecia profunda de un solo bocado. Bien, hoy vengo a liberarte de esa presión o a desilusionarte un poco, quién sabe, porque te diré que no hay una receta 100% fiable. El auténtico tiramisú es el que auténticamente te salga a ti hacer, eso sí, respetando unos ingredientes base, a saber: mascarpone, huevos, soletillas, café, licor y cacao. Y a partir de ahí, ancha es Castilla.

Pero déjame hablarte un poco de los ingredientes para que te quede bien claro cómo dar con tu receta de tiramisú perfecta.

• Mascarpone. Seguro que apostarías la cabeza al afirmar que el mascarpone es un queso fresco italiano. Bien, es fresco, y de origen italiano. Pero déjame decirte que técnicamente hablando no es un queso. Es decir, no se elabora de la forma en que se elaboran estos, si no que se elabora a partir de nata. ¿Sabías que puedes hacer mascarpone con tus manitas en casa? Si te interesa que lo trate déjame un comentario aquí debajo. Te adelanto que tan sólo necesitarás nata con el 35% de materia grasa y zumo de limón. En lo que a tiramisú se refiere el mascarpone formará el grueso de la receta. Es la parte más importante de la crema que deberás elaborar. Es el actor principal de la obra. Especial cuidado has de tener a la hora de batirlo, si te pasas de fuerza en el batido se cortará, como ocurre con la nata.
• Huevos. Los huevos se mezclan con el mascarpone para elaborar la crema. Aunque si quieres hacer un tiramisú exprés, como este que te enseñé en tu día, puedes prescindir de ellos. ¿Para qué sirven los huevos? Para dar ligereza y esponjosidad a la crema. El mascarpone es bastante denso, así que los huevos ayudan a hacer una mezcla más delicada. Para que quede una mezcla delicada y no líquida, debes separar las claras de las yemas y montarlas por separado. Las claras a punto de nieve y las yemas hasta blanquear y triplicar su volumen. Como te enseñé a la hora de hacer un bizcocho ligero. Hay quien sólo usa yemas, quien usa una proporción de 3 huevos por 500 gr de mascarpone y quien usa 6 para el mismo peso. ¿De qué depende? De lo ligera que quieras la crema. Si te gusta más densa, echa menos huevo, si te gusta más ligera echa más. Como recomendación déjame decirte que no te excedas de 5 huevos por 500 gr de mascarpone. Pero ya sabes que la cocina y el comer es cuestión de gustos.
• Café. Relegado a un segundo plano en este postre pero de vital importancia. El regusto a café del tiramisú es lo que lo convierte en un postre tan especial, así que hazte con un buen café. Suele emplearse un café intenso, potente, pero puedes usar el que tú quieras. Yo lo he hecho con el Espresso Intenso descafeinado de Dolce Gusto para poder darme el capricho de postre para cenar.  Ten en cuenta que el café ha de ser solo, intenso, sin leche, para darle ese toque especial.

 

• Soletillas. Galletitas o bizcochitos alargados, redondeados, dulces, secos, ligeros y crujientes. Al menos las que necesitarás para este postre. En el supermercado encontrarás dos variedades. Las soletillas crujientes que se parecen más a una galleta y las soletillas blandas, más parecidas a un bizcocho. Para el tiramisú necesitarás las duras, las que son tipo galleta. Deberás remojarlas en el café y las más parecidas a bizcocho se reblandecerían demasiado.
• Licor. Opcional pero recomendable. Echa un chorrito de ron tostado o brandy al café y dale ese toque picarón.
• Cacao en polvo. Cacao amargo y sin azúcar siempre. Puedes darle el toque final espolvoreándolo por la superficie o echar unas cuantas capas. A tu gusto.
• Azúcar. Como todo postre que presume de serlo, necesita endulzarse. No te lo he marcado como imprescindible porque realmente el dulzor lo marcarás tú. Para las proporciones que te enseñaré te recomiendo que, como mínimo, calcules 25 gramos de azúcar por huevo y un par de cucharadas más para ayudar al montado de las claras. Con estas cantidades te quedará un postre dulce, pero no excesivo, tal y como me gusta a mí. Pero si eres más goloso, añade un poquito más. Además, si quieres que te quede una crema delicada 100%, utiliza azúcar glas. Es cierto que el azúcar glas lleva un pequeño porcentaje de almidón, pero en este caso, con triturar azúcar blanca hasta hacerla polvo te sirve.

Y una vez vista la teoría vamos a la práctica. Estas cantidades son las mías pero, con todo lo que te he contado, creo que no tendrás ningún inconveniente en adaptar las medidas a tus gustos personales.

Notas.

• Echamos el cacao antes de servir para que quede más chulo. Si lo dejamos reposar en la nevera con el cacao, este se humedecerá y oscurecerá. Aunque te diré que a mí me resulta muy aparente de todos modos.
• Puedes hacer este postre en vasos individuales. Queda muy divertido y es más cómodo de servir.
• Ten cuenta que es un postre que lleva huevo crudo, por lo que debes extremar las precauciones. Asegúrate de que son frescos y consume el postre en los dos días siguientes. También puedes usar claras y yemas pasteurizadas. Para ello recuerda que una clara pesa aproximadamente 30 gramos y una yema 20 gramos si tenemos como referencia un huevo mediano.

He querido contarte todas estas cositas de la nueva cafetera de Dolce Gusto porque, personalmente, siempre que voy a comprar algo me gusta ver las opiniones sinceras de la gente para saber si será una buena inversión o no.

Por otra parte, siendo consciente de que pueda irradiar publicidad por todos los poros te diré que, si fuera un producto que no me hubiera gustado, habría rechazado probarlo y hablar de él. Así que si tienes cualquier duda sobre el producto o la receta me tienes aquí para lo que quieras. Y si quieres que haga un vídeo enseñándotela con más detalle no dudes en dejarme un comentario, pedírmelo por las redes o enviarme un correo. Te la enseñaré con mucho gusto.