¡Viernes de pecado!
Creo que tengo un problema con el queso… ¿Sabías que actualmente se ha demostrado que el queso tiene una sustancia adictiva? Pues eso, que soy una yonki del queso. Los dos viernes de pecado que llevamos… con queso. ¡Es que está tan rico! De todos los colores y sabores. El queso me produce la misma sensación que a Homer el chocolaaaaaaate (¿a que lo leíste con voz de Homer Simpson? 😉 ).
El queso provolone lo llevamos comiendo en casa desde que el mundo es mundo. Al horno, a la parrilla… Sólo, con tomate, con jamón, con tomate y jamón… Al principio éramos un poco más tímidos. Cortábamos rodajas de tomate gruesas y las horneábamos con pedacitos de provolone por encima. La proporción fue variando hasta convertirse en lo que ves ahora. Me atrevo a decir que es mi receta favorita dentro de las facilonas y rápidas.
¿Qué mejor para un viernes?
El provolone es un queso italiano, semiduro, hecho con leche de vaca entera. Se comercializan múltiples variantes. Desde un sabor más intenso hasta un sabor más suave. También lo puedes encontrar con especias. Personalmente prefiero añadírselas yo después de hornear para que conserven su aroma.
Ten en cuenta que, como en todo, hay una diferencia enorme de una marca a otra. El otro día sin ir más lejos compré una marca que me resultó un pelín salada para tomarlo solo. En este caso hubiera venido bien hacer la receta que te traigo hoy por la combinación de sabores.
No dejes de probarlo, de verdad. 200% recomendable. Es otra de esas recetas simplonas que te sacarán de un apuro y que disfrutarás como un niño.
Ni qué decir tiene que la combinación de sabores que te traigo hoy es de las mejores que existen, queso, jamón y tomate. No hace falta más. Y no me digas que no queda genial presentándolo en una cazuelita de barro 🙂
Ingredientes:
- Provolone.
- Un tomate pequeño.
- Taquitos de jamón o lonchas de jamón serrano.
- Orégano y albahaca.
Elaboración:
- Enciende el horno a 200º, con calor arriba y abajo.
- Lava muy bien el tomate y corta en rodajas finas.
- En un recipiente apto para el horno coloca el provolone, encima el tomate y después el jamón.
- Horneamos a 200º durante 15 minutos. Como cada horno es un mundo te dejo mi truquillo particular. Cuando el queso haga burbujitas y esté un poco dorado ya está listo. En la galería tienes la foto para que veas el punto que te digo.
- Saca, espolvorea con las especias y sirve inmediatamente.
Notas.
- Has de servir inmediatamente porque el provolone enfría muy rápido y vuelve a endurecer. Pasados unos minutos pasarás de tener que servirlo con cuchara a servirlo con cuchillo y paleta. Pero está bueno igual. De hecho yo lo prefiero en este punto en el que se corta bien con el cuchillo. No frío, si no tibio. Pero sabes cual es la manera de encontrar tu punto favorito, ¿no? ¡Probar!
- No dejes de probar las opciones que te comentaba. Solo, a la parrilla, tomate con lonchas de provolone… Ya me contarás.
- Si te has animado a preparar esta receta y quieres compartir tu foto y tus comentarios con el mundo, ponte en contacto conmigo y envíamelo. Me encantaría compartirlo en mis redes.
- Recuerda que tengo a la venta mi curso para aprender a cocinar desde cero. Aquí tienes toda la información y yo te acompañaré en el camino.
- Puedes seguir las novedades del blog a través Facebook, Twitter e Instagram o por mail apuntándote aquí debajo. Y si eres aficionado a la video-recetas SUSCRÍBETE a mi canal de Youtube.
Dani dice
Pues yo que soy muy quesero también nunca lo probé, así que ya estoy tardando, porque tiene un pinta…, ya me dirás dónde lo compras, porque yo no lo suelo ver por ahí.
Ana dice
Qué raro, yo lo veo en todos los sitios. Lo tengo comprado en Carrefour, Mercadona y Alcampo. En supermercado no lo recuerdo, pero en hiper en todos. Echaré un vistacito y te cuento 😉
Maria Pop dice
¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡ooooo que rico !!!!!!! yo lo hacía sin tomates y jamón , al horno y me salía rico pero para la próxima voy a probar tu receta que se ve riquiiiiiisima
Ana dice
Gracias María!! A mí solo también me encanta, pero lo hago así de vez en cuando por variar y mmmmm, y así no me siento tan culpable por comer queso sólo “a cucharadas” jajaja. Un besito!
María de La cajita de música dice
Qué buena pinta! A mi querido le encanta el queso, tendré que probar… 😉
Ana dice
Muchas gracias María! Pues anímate porque está riquísimo. No hay receta con queso de la que esté tan segura como de esta 🙂 Un besote!
Yolanda - Magdalena de Chocolate dice
Es una delicia! Yo lo hago sin tomate natural, pero lo probaré como lo haces tú que tiene que estar todavía más rico 😀
Un beso!
Ana dice
Muchas gracias guapa!! En mi casa se ha convertido en un incondicional, mmmmmmm, por qué me gustará tanto el queso con lo malo que es, jooooo. 🙂 Un besote!