¿Qué hay para cenar? Ensalada caprese.
Uy, ensalada caprese… ¡qué categoría! Y eso ¿qué es?
¡La ensalada más fácil del mundo con un nombre que hace que parezca la releche!
Cómo resistirse, ¿verdad?
Hay veces que para alguna ocasión especial nos complicamos en exceso y no nos acordamos de las combinaciones menos elaboradas. Esta es una de las recetas que no puede faltar en ningún recetario porque, aunque no tenga complicación ninguna, la combinación de sabores es espectacular. Y, amigo, aprender a cocinar no es sólo tratar los alimentos, si no aprender a combinarlos.
Es un trío que nunca falla, tomate, mozzarella y albahaca. De la albahaca hemos hablado con detenimiento en el Reto Especialízate. ¿Lo has visto? Por una parte te conté los aspectos teóricos más relevantes y por otra te enseñé un montón de recetas para hacer con ella.
Ni qué decir que nada tiene que ver la albahaca fresca con la seca. Siempre es mejor la versión fresca, para todo, aunque podemos hacer apaños con la versión seca en momentos de apuro. Es super importante tener una buena despensa de especias, porque gracias a ella podemos dar la vuelta a un plato totalmente.
En cuanto a la mozzarella decirte simplemente que es un queso fresco, por lo que su sabor es suave. Quizá podríamos hablar de una textura o consistencia un poco gomosa, pero es fantástico. Si lo combinas con tomate acertarás siempre. Es un ingrediente muy habitual en las pizzas.
¿Lo has usado alguna vez?
Seguro que sí. Aunque nos salgamos un poco del tema de hoy déjame contarte un secreto. Quizá si has hecho pizza con mozzarella alguna vez te haya quedado aguada, ¿es así?
Bien, si te ha pasado eso es normal. No puedes echar la mozzarella tal cual en la pizza porque contiene gran cantidad de agua. Lo que debes hacer es cortarla en láminas del grosor que quieras y prensarla en un trapo limpio. Así soltará el agua y podrás añadirla a la pizza sin miedo a que te la arruine.
Y ahora, vamos con mi ensalada favorita. Aquí no hace falta que la prenses porque es una ensalada, es frescor puro.
- Tomate.
- Mozzarella fresca de bola.
- Albahaca fresca.
- Aceite de oliva virgen extra.
- Sal.
- Pimienta.
Elaboración:
- Lava las hojas de albahaca.
- Lava y corta el tomate en rodajas.
- Corta la mozzarella en rodajas.
- Dispón en el plato el tomate, la mozzarella y las hojas de albahaca de una forma un poco mona. Puedes picar el “culo” de los tomates y colocar en el centro con un poquito de mozzarella también picada.
- Riega con un chorrito de aceite de oliva y pon a punto de sal y pimienta. Sirve.
Pero es que la albahaca fresca es tan difícil de encontrar…
¡Pues hazla con albahaca seca!
Y la mozzarella fresca… no te creas que es fácil…
¿Qué te parece esta versión con tomates cherry y queso fresco?
¿Sabías que… ?
La albahaca, mientras en Europa era considerada como venenosa (por su aceite esencial rico en estragol), en la India era reverenciada.
Se le atribuyen beneficios gástricos y propiedades sedantes.
Chuspi dice
Todo un descubrimiento la albahaca fresca, una ensalada sencilla y genial, estoy comenzando en la cocina, empecé por esta ensalada y quedé encantado, seguiré con más recetas tuyas!!
Ana dice
Mil gracias Chuspi! Cuanto me alegro. A mi me encanta esta ensalada es mi favorita tanto por su sencillez como por su sabor. Cualquier duda que te surja aqui me tienes. Un abrazo.