¡Hoy te traigo la auténtica receta de fabada asturiana!
¿Cuántas veces has escuchado eso? Seguro que muchísimas. Pero, realmente, ¿cuál es la auténtica fabada asturiana? Sinceramente no lo sé. Pondría la mano en el fuego porque es la que te traigo hoy pero por ahí te encuentras tantas cosas que… ¡vete tú a saber!
Yo soy asturiana y en mi casa se lleva haciendo la fabada de la misma forma toda la vida. En realidad… qué hay más auténtico que un asturiano haciendo la fabada, ¿no? Como nos las enseñaron nuestras madres y nuestras abuelas. Creo que nos estamos volviendo todos un poco locos con el tema de lo auténtico, de lo original. ¿Qué más da quien haya hecho la primera receta? Sería muy aburrido si lo hiciéramos todos igual. Si así fuera, no existiría la gastronomía tal y como la conocemos hoy en día, porque tan sólo se trataría de repetir lo original; y lo bonito y lo lógico es evolucionar. Da igual de qué receta tradicional, original o auténtica hablemos, porque, según quien la haga, va a tener un toque diferente que se adapte a sus gustos, sea un chino de la china popular el que haga la fabada o un asturiano de pura cepa.
En mi casa, de toda la vida, se ha hecho la fabada “a pelo”, con sus fabas y su compango, punto pelota. Fabas, chorizo, morcilla, lacón y panceta, sin más. Pero es cierto que hay multitud de recetas que añaden cebolla, ajo, pimentón, aceite de oliva… y un montón de cosas más. Sólo me voy a pronunciar respecto al aceite de oliva. ¿Qué necesidad hay de echar aceite de oliva a una elaboración que por sí sola ya tiene la suficiente grasa? Hablo de la grasa que le aporta el compango. Creo que ninguna. En cuanto a lo demás no voy a decir nada, porque cada uno tiene sus gustos y le mete lo que quiera. Dejando al margen lo original o primigenio, sólo te voy a decir que, para hacer una fabada, tan sólo necesitas fabas y compango. Nada más. Lo demás ya va al gusto de cada uno. Pero simplemente con eso ya tienes una fabada asturiana de la leche.
Como los ingredientes son los que son y no necesitan ninguna preelaboración, debemos cuidar al máximo la calidad de los mismos. Lo que quiero decir con esto es que no puedes pretender que te salga una fabada cojonuda con unos ingredientes que dejen mucho que desear. Necesitarás unas fabas de calidad y un compango que le corresponda. Para las fabas te aconsejo ir a la frutería o tienda de barrio donde sepas que la calidad es buena. El compango lo encontramos bueno en cualquier supermercado, en packs especiales para fabada envasados al vacío. Pero, por supuesto, si lo compras en la charcutería de confianza sería la bomba.
¿Qué pasa con el agua de remojo? Habrás escuchado que hay gente que usa el mismo agua de remojo para cocer las fabas y gente que dice que es una barbaridad. Después de muchas pruebas yo aconsejo usarlo. Nunca me habían quedado del todo bien las fabas, aunque las tuviera el tiempo que tenían que estar parecía que siempre ofrecían una pequeña resistencia. Hasta que me decidí a usar el agua de remojo para cocerlas, algo que antes no hacía. Ahora me quedan perfectas. No sé si tendrá que ver o no, pero se dio esa casualidad. Eso sí, si vas a usarla te recomiendo usar agua mineral, de botella o agua que sepamos que es buena. Yo tengo en casa un equipo de ósmosis para depurar el agua del grifo (bueno, de momento lo tiene el banco). No es por ser tiquismiquis, es porque según la zona en la que estés, el agua será más o menos dura, por lo que el tiempo de cocción variará. De esta forma casi nos podemos asegurar la terneza de las fabas.
Ingredientes (para 3 personas):
- 250 gr de fabas de la granja.
- 1 chorizo para fabada.
- 1 morcilla para fabada.
- 1 trozo de panceta (150 gr aproximadamente).
- 1 trozo de lacón (150 gr aproximadamente).
- 1 hoja de laurel (opcional).
Elaboración:
- La noche anterior lava las fabas en un escurridor debajo del chorro de agua fría por si tuvieran algún resto de tierra. Y ponlas a remojo en un olla amplia (la que vayas a usar para cocerlas) con agua fría (mejor si es mineral). Debe sobrepasarlas al menos dos o tres dedos para que no se queden sin agua y nos quede agua para cocerlas.
- Por otra parte pon el lacón a desalar, en un bol con agua fría. Déjalo también toda la noche.
- Al día siguiente ya tendrás las fabas hidratadas y el lacón desalado. Deja las fabas en la misma cazuela con el agua de remojo (debe cubrir un dedo por encima de las fabas) y añada el lacón desalado, el chorizo, la morcilla, la panceta y el laurel (opcional). El chorizo y la morcilla los pincharemos con un cuchillo unas 6 veces (3 por lado) repartidas por la superficie para que no revienten en la cocción. Coloca el compango debajo de las fabas y pon a fuego fuerte.
- Cuando el conjunto rompa a hervir baja el fuego un poco mientras desespumas la fabada (se trata de quitar las impurezas que suben a la superficie, como hacemos con los caldos). También puedes quitar un poco de grasa de la superficie si te gusta más ligera. Como la grasa flota, tan solo tienes que pasar una cuchara por la superficie, y quitar “lo naranjita”. Una vez desespumado baja el fuego al mínimo y deja cocer durante 2 horas aproximadamente, hasta que las fabas estén tiernas.
- Puedes cocer con la cazuela tapada o destapada, el tapar la olla tan sólo hará que se concentre más el calor y que se evapore menos agua debido a la condensación que se forma en la tapa que vuelve a la cazuela. De una forma u otra hay que tener cuidado de no quedarse sin agua y de que la cocción sea suave. Si ves que el agua comienza a hervir fuerte añade un poco de agua fría. Esto es lo que se llama asustar a las fabas. Hay quien recomienda hacerlo 3 veces en la cocción pero no es necesario, solo si nos lo pide la faba. Yo no suelo asustarlas porque controlo la cocción.
- Del mismo modo, si ves que te quedamos sin agua, añade más, las fabas han de estar cubiertas de agua en todo momento para que no se despellejen.
- ¡LAS FABAS NO SE TOCAN! Si quieres removerlas dale un meneo al rondón cogiéndolo por las asas, nada más.
- Ve probando hasta que estén tiernas. Tardarán aproximadamente 2 horas, pero depende de la calidad de la faba.
- Apaga el fuego y deja reposar al menos 30 minutos.
- Corta el compango en trozos y sirve caliente.
- Se puede servir con un trozo de morcilla, un trozo de chorizo, un trozo de lacón y un trozo de panceta en el plato, o las fabas por un lado y el compango por otro para que cada uno se sirva lo que quiera.
- Fabada asturiana
Notas.
- Para reducir la cantidad de grasa del conjunto puedes blanquear el compango antes de incorporarlo a la fabada. Se trata de meterlo en un cazo cubierto con agua fría y llevar a ebullición. Una vez llegado este punto se retira y se incorpora el compango a la olla para hacer la fabada y se procede como siempre. La idea es buena pero la fabada queda con menos sustancia.
- No es necesario echar sal porque el compango de por sí ya es demasiado salado, pero siempre es conveniente rectificar al gusto de cada uno.
- La fabada está más buena hecha de un día para otro, porque aposentan los sabores.
- Se pueden congelar perfectamente. Es más, hay personas que incluso congelan las pocas fabas que hayan sobrado, aunque sean 4 (yo entre ellas), para incluirlas en la receta de pote asturiano que se hace a base de berza y patatas.
- Si no tienes tiempo para hacer el remojo de las fabas existe un truco, aunque no es muy recomendable porque se dice que cambia ligeramente el sabor. Puedes añadir una cucharadita de bicarbonato al agua de remojo para que se hidraten antes, en 3-4 horas estarán listas. Eso sí, en este caso no uses el agua de remojo para cocer las fabas.
¿Te ha gustado el artículo? ¡COMPARTE! Me harías muy feliz.
- Si te has animado a preparar esta receta y quieres compartir tu foto y tus comentarios con el mundo, ponte en contacto conmigo y envíamelo. Me encantaría compartirlo en mis redes.
- Recuerda que tengo a la venta mi curso para aprender a cocinar desde cero. Aquí tienes toda la información y yo te acompañaré en el camino.
- Puedes seguir las novedades del blog a través Facebook, Twitter e Instagram o por mail apuntándote aquí debajo. Y si eres aficionado a la video-recetas SUSCRÍBETE a mi canal de Youtube.
Mazui dice
Así es como la hace mi madre y yo también , claro. No tiene ninguna complicación y está de muerte!!
Las que llevan cebolla, ajo, ajada, hasta con sofrito las he visto… no me gustan nada :/
Y por supuesto, al día siguiente cuando las fabes están deshechitas y el caldo espeso, mmmmm… pureza! (como diría David de Jorge ;D )
Ana dice
Es que es lo mejor. A pelo. No sé para qué se complican con añadidos. Gustar me gustan todas, porque soy de buen comer. Pero como le pasará a todo el mundo, como las de mi madre ningunas 🙂 Un abrazo!
Cuky's Cookies (Kim) dice
Uno de mis platos favoritos de la tierrina en particular y de todo en general ^_^
No hay nada mejor que unas buenas fabinas.
Feliz semana. Un besote!
Ana dice
Lo buenas que están y lo fáciles que son. Asturianas tenían que ser 🙂 Feliz semana! Un abrazo!
jose raul dice
tienes que prepararles a los franceses una fabada seguro que los sorpendes
Ana dice
Eso mismo pensé cuando la estaba comiendo. Tanta mantequilla y tanta leche… Fabada! A ver si hay manera 🙂
Maria dice
Por fin alguien q haz la fabada de verdad, sin añadidos o casi, lo del lauerel yo no lo llevo, y hace años trabaje en una sidreria de Oviedo, y el cocinero se lo ponía hasta q la empece a hacer yo la fabada y los clientes lo agredecieron enormemente
Ana dice
Estoy totalmente de acuerdo contigo María. Yo del laurel también paso como ves en las imágenes pero hay gente que le gusta. Para mí el auténtico sabor es el de las fabas y el compango, sin más. Cuánto me alegro de que haya gente como tú que opine igual. Los añadidos para quien los quiera. Yo también te lo habría agradecido enormemente 🙂 Un abrazo
Jaime Toledo dice
Me gusta como piensas. Para qué usar aceite si ya tienes grasa.
No cabe duda que menos es más. Muchas veces buscamos el ingrediente secreto; ese componente que hará que nuestro guisado despegue.
Hay veces que sólo necesitamos hacer las cosas de manera diferente y los resultados pueden ser sorprendentes.
De nuevo gracias por fundamentar cada paso y explicarnos el porqué de cada cosa.
Rosa dice
Que puedo hacer si me quedaron las fabes duras?
Ana dice
Si has seguido todos los pasos (usar el agua de remojo para la cocción, usar un agua adecuada o un agua embotellada, hacer un remojo de al menos 8 horas), es falta de cocción. Deberás dejarlas cociendo más tiempo hasta que estén tiernas.