Pedazo de título que me he marcado.
Pero es que es muy importante ese matiz de “sin que se noten las cuerdas”. Estarás harto de escucharme decir que aprender a cocinar requiere muchas más cosas que el cocinar en sí. Que si combinaciones de sabores, currarse emplatados chulos y, cómo no, las preelaboraciones.
Bridar un pollo para que mantenga la forma es fácil. Quiero decir, si no tienes ni pajolera idea de cómo se brida un pollo siempre puedes liarte con la cuerda o hilo de bramante y marcarte “la de la momia”. No estaría mal, le hacemos una camisa de fuerza al pollo y arreando. Pero no queda muy profesional.
Y no solo eso, si una vez horneado no se notasen las marcas, nos quedaríamos tan anchos. Pero vamos a ser un poco consecuentes, que aquí estamos para hacer las cosas bien y el saber no ocupa lugar.
¿Qué vas a conseguir cuando aprendas a bridar un pollo?
Vas a ahorrar en hilo de bramante (no te va a dar para hacerte un viaje al Congo con lo que ahorres, pero vamos a dejar de tirar cosas que está muy feo), te vas a poder tirar el moco delante de familiares y amigos, y el pollo va a quedar chulo, chulo, sin ninguna marca, como si estuviera posando mientras los horneas.
¿Para que queremos bridar un pollo?
Básicamente para que no quede espatarrado que queda poco fino, y para que no se escape el relleno en caso de que quieras meterle algo por el culillo rellenarlo con algo.
Como acostumbro últimamente te dejo el vídeo correspondiente. No es que yo tenga manos enormes, es que te traigo un tutorial con un pollo picantón, y pesan entre 200 y 400 gr. Pero la morfología es la misma, por lo que el procedimiento también.
Puedes proceder del mismo modo con cualquier tipo de ave.
Cómo bridar un pollo para asar:
- Pasa el hilo por debajo del culillo, crúzalo por arriba y deja caer cada extremo sobre los muslos.
- Rodea cada extremo del muslo con el hilo y crúzalo hacia el otro lado.
- Tensa tirando de cada hilo para que se junten las dos zancas, el culillo y la pechuga, y pasa los hilos por debajo de la pechuga.
- Rodea cada alita con el hilo correspondiente de cada lado. Levántalo un poco por detrás y rodea la alita. Haz lo mismo con la otra alita.
- Tira de los dos extremos y vuelve a meter la cuerda por donde la llevaste, por debajo de la pechuga. Entrelaza dando un par de vueltas y aprieta bien dejando el hilo bien metido por debajo de la pechuga.
- Una vez que esté bien tenso haz un nudo para que no se afloje y corta el hilo.
- Ahora mete las puntas de las alitas entre la pechuga y el resto de la alita. Al estar bien tenso no se escapará.
- En lugar de esconder las puntas de las alitas entre la pechuga y la alita, también puedes sujetar las puntas a la espalda cuando pasas el hilo como ves en el vídeo.
Notas.
- Si quieres puedes superponer el extremo de un muslo por encima del otro, como te enseño con el segundo pollo. Es como se suele presentar, pero a mí me gusta mas así. Tan sólo tienes que tensar la cuerda una vez que le hayas cruzado los extremos.
- No te olvides de quitarle las plumas y limpiarlo bien antes de bridarlo.
Y eso es todo. Fácil, ¿verdad? ¿Ya sabías bridar un pollo de ese modo? ¿Te gustaría que hiciera más tutoriales básicos de este tipo? Déjame en comentarios lo que te gustaría ver y me pongo manos a la obra.
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Nacho dice
Esto de los videos te va a dar mucho juego!!! me encanta y voy aprendiendo cosas casi sin esfuerzo.
Te recomiendo que veas como enlazar entre videos del propio canal de youtube.. ayudara a “Fidelizar” visitantes.
Ana dice
Gracias Nacho. Lo he hecho en el último como me has dicho. Pero la verdad que con mi programa hiper básico de edición no me queda muy allá… Pero tienes toda la razón del mundo. A ver cuando pase toda esta locura de fiestas si logro ponerme con ello y encuentro una opción mejor. Mil gracias por tus palabras y consejo 🙂 ¡Felices fiestas!
Manuel dice
Hola,Ana.
Son exactamente las 3.58 de la madrugada,y” que si quieres arroz Catalina”;esto es,que de dormirme,”tururú” Buscando en internet una solución a mis continuos “desinfles bizcochales”,
he tropezado casualmente contigo (perdón) quiero decir, con tus recetas en “afreiresparragos.com” y te confieso que lo que menos me interesa ya,es la receta en sí.
Tus comentarios a lo largo de la misma son los que me han hecho reír como no lo hacia
desde que “Martes y Trece”decidieron ponerse a freír no se que dichosas empanadillas.
(¿si sería tuya la receta?)
Se me acaba el espacio y también el “rollo”.
Eres,simplemente,¡GENIAL!,Ana.Seguiré todas y cada una de tus recetas “deloquesean”,
palabra.
Gracias por existir.
Manuel.
Manuel dice
¡Cago,n mi mantu,si yes de la tierrina!
¡Puxa Asturies!
Manuel,de nuevo.
Ana dice
Jajajajajaja, sí. ¡No me digas que tú también!
Ana dice
¡Buenos días Manuel! No sabes lo bien que me viene que me hayas dicho la hora exacta de su desvele porque me acabo de dar cuenta que mi reloj del panel de administración no coincide ni en la hora.
¡Lo que me he reído al leerte! Pero por dios, no me digas que lo que menos te importa ya son las recetas porque si no me hundes, ¡que es mi objetivo principal! Jajajajaja. No, en serio, mil gracias por tus palabras. Me encanta escribir y, si tuviera un poco más de imaginación que una patata me decantaría por ahí, te lo aseguro. Pero mientras tanto toca desahogarse así. Y saber que hay alguien ahí detrás a quien le remueve algo, o me deja al mismo nivel que la empanadillas de Martes y Trece, es lo más de lo más y me ilusiona que no veas (no, no era mía la receta).
Un millón de gracias a ti por existir y dejarme comentarios como este.
Un abrazo y ¡feliz año!